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Fármacos

Fármacos

Sedantes y tranquilizantes.

Por definición, un sedante es un agente tranquilizante, y un hipnótico es un inductor del sueño. Un hipnótico es a veces el mismo fármaco que el sedante, si se utiliza a una dosis más alta. Los agentes anti-ansiedad son similares a los sedantes y reducen la ansiedad y facilitan el sueño.

Hay varios tipos de esta clase de drogas. Las primeras y más ampliamente utilizadas son las benzodiazepinas (BZs). Esto se debe a que las benzodiazepinas son únicas en términos de seguridad. Las dosis muy altas de BZs por sí solas no causan automáticamente la muerte por sobredosis. Por esta razón, debido a que son relativamente seguras, las benzodiazepinas son probablemente los medicamentos más utilizados en esta clase.

Sin embargo, es muy importante saber que cuando se toma con otros depresores como el alcohol, puede aumentar la letalidad de estas sustancias.

Los efectos de las benzodiacepinas pueden ser la sedación hasta la intoxicación, la disminución de la ansiedad, la relajación muscular, el sueño, la amnesia, la actividad anticonvulsiva y, lamentablemente, el abuso y la adicción.

Si se interrumpe abruptamente el uso de BZ después de un consumo prolongado, se puede experimentar sindrome de la abstinencia de benzodiazepina y en algunos pacientes puede llegar a ser muy grave. Los signos y síntomas de abstinencia incluyen ansiedad, temblor, pesadillas, insomnio, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, convulsiones y delirio. De hecho, la retirada abrupta puede ser fatal. Aunque el síndrome de abstinencia no siempre ocurre, el regreso de los síntomas de ansiedad es muy probable. Por lo general, si el paciente está tomando una benzodiacepina bajo prescripción médica, se le indicará para detener su uso, reducir la dosis gradualmente durante un período de tiempo. Esta reducción gradual tiende a minimizar cualquier síntoma de abstinencia

Las benzodiazepinas son muy útiles para muchos pacientes. Sin embargo, son muy adictivas.

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