La dopamina y las adicciones - parte 3 - Dopamina y comportamiento sexual

Con respecto al comportamiento sexual y la dopamina, se sabe desde hace mucho tiempo que, por ejemplo, las inyecciones de drogas relacionadas con la dopamina en el hipotálamo de los animales de laboratorio pueden influir en la interacción entre ratas macho y hembra y en el número o las eyaculaciones producidas por el macho.

Otro experimento ha asociado la actividad sexual con la dopamina en el núcleo accumbens, una región del cerebro bien conocida por estar conectada a las drogas.

En un estudio de sujetos humanos que se habían enamorado recientemente, hubo activaciones en el área tegmental ventral, parte del sistema mesolímbico de la dopamina. En estudios de orgasmos masculinos, el área ventral tegmental fue una de las regiones activadas. En un artículo titulado "Prelude to passion; limbic activation by “unseen” drug and sexual cues" https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/18231593 unos investigadores de la Universidad de Pensilvania encontraron que hubo activación límbica en sujetos que recibieron señales sobre drogas y sexo fuera de la conciencia. El cerebro puede recibir señales cortas que están fuera de nuestro reconocimiento consciente, y esas señales se conocen como señales "invisibles"; el documento muestra que los circuitos de recompensa cerebral responden a estas señales invisibles. Esto demuestra una vulnerabilidad interesante y adicional del cerebro a las drogas y otros estímulos.

Un punto importante aquí es que las elevaciones en la dopamina y las activaciones de las áreas dopaminérgicas están asociadas con impulsos poderosos, como el impulso sexual para aparearse, que es crítico para la supervivencia de la especie. El aumento de la dopamina se asocia con algo que te hace sentir bien o con algo que se desea hacer una y otra vez.